La última vez que vimos a los chicos de Kenedy, hablamos de Wembley. Del coraje para hacer que en una sala donde había unas veinte personas un grupo fuese capaz de dejarse la piel, de tocar como si fuese el estadio británico el que acogiese el espectáculo. Entre medias de aquel día, ese en el que preguntamos a Kenedy por la posibilidad de grabar un álbum largo, y el día de hoy, tan solo hay GUTS.
No es ajeno a ninguno de los que hemos apoyado de forma incondicional a la banda sevillana, que todo el camino de baldosas amarillas ha sido igual de difícil que aquel que Dorothy recorrió un día. Cambios en la formación, el fichaje por un nuevo sello, y todo alrededor de la preparación y grabación de un nuevo trabajo, dejan ver que la madurez ha llegado a ellos a marchas forzadas. Han respondido, han sabido devolver con fuerza el golpe a la vida, y así presumir de “solo los más valientes permanecen”. En realidad este disco es un gran homenaje a ellos mismos y a todos aquellos que han, que hemos, aguardado pacientemente a que Kenedy tuviesen los minutos suficientes para expandir su música en nuestros reproductores. Tal vez es por todo eso que la voz de Iñigo suena más rota, más profunda que nunca, tal vez por el simple hecho de que ha tenido que buscarla entre sentimientos encontrados.
Este álbum es un gran tributo a aquellas bandas que les han nutrido. Un paseo desde los campos del municipio de Brent, hasta las profundidades del océano, encontrando en ese paseo todos aquellos matices con los que han jugado como expertos. Desafiando las tendencias y las modas, se han mantenido fieles a sus referencias, han continuado cantando en inglés, se han permitido incluir en el corte tres un tema de más de siete minutos, y han flirteado con sonidos que hasta ahora nos eran desconocidos bajo su nombre. Lo mejor de ello, es que siempre ha seguido predominando la ilusión y las ganas de compartir con el mundo lo que estaban creando en su retiro.
Sin duda al destapar Guts encontrarás, bajo cuatro portadas diferentes, un trabajo al que dedicar tiempo. En el que querrás dejarte envolver. Y da igual la que elijas, cualquiera de ellas, a pesar de las apariencias, esconde lo mismo; las ganas de estos chicos de ser escuchados.
Autor; Shara Sánchez