La fría y lluviosa noche de la ciclogénesis explosiva del sábado recibió a los catalanes de Pastora para presentar en Madrid su último trabajo Una Altra Galáxia. La Sala Penélope, la de la archiconocida chica del sombrero, fue el lugar elegido para el show y poco a poco fue llenándose hasta presentar un magnífico aspecto.
Guitarras, teclados y varios ordenadores, de esos de la manzanita, llenaban un escenario que estaba flanqueado por dos pantallas donde se proyectaba la portada del último trabajo del grupo. Faltaban 10 minutos para las 22.00h cuando daba comienzo el show con la preciosa Desolado y con una Dolo ataviada con gabardina, gafas de sol y guantes de encaje al más puro estilo Audrey Hepburn y con un público entregado desde el primer minuto.
Continuaron con Tengo y en el tercer tema del concierto reivindicaron esa necesidad común que tenemos todos, no de tener grandes palacios, sino de tener un Pedazo de Tierra para poder vivir. Mientras se sucedían los temas, las pantallas de la sala continuaban mostrando los dibujos que Pauet realizaba en directo, siendo el compañero visual perfecto al sonido limpio y enérgico que salía desde el escenario. Sin parar de bailar se sucedían los temas en un directo realmente envolvente que te atrapa por su cercanía bajo unas letras en las que fácilmente todos podemos vernos reflejados. Los temas en catalán como Mals Habits ó Sentit de L´Humor se entremezclaban perfectamente con los temas en castellano como Octubre ó Mirona en un show con un ritmo vibrante.
Vimos a una Dolo habladora y expresiva entre tema y tema. Después de contarnos el porque nos gusta a todos estar siempre metidos en el ajo -sea con corazón o sin él- llegaba la situación más Cósmica de la noche donde todo el publico volvía a bailar sin freno al ritmo de la música.
Con la hipnótica y fiestera Decibelios el hermano de Caïm dejaba su segundo plano en el show, mientras Dolo nos contaba que es él quien ahora la acompaña cuando sale por Barcelona de fiesta. Mientas la frontman de la banda salía del escenario para cambiar el precioso vestido azul por uno plateado mucho más sexy y escotado que dejaba toda su espalda al aire, las tres voces masculinas se juntaban encima del escenario para tocar la rockanrolera Mixeres. Con la vuelta al escenario de la cantante, Dolo nos pidió aun favor a todos los presentes, que no la llamásemos Dolores que mejor la llamemos Lola. Tema con el que Pastora se dio a conocer ante el gran publico hace ya unos cuantos años.
Se lo pasan bien encima del escenario y eso se transmite a todos los asistentes, incluso mientras solventaban el problema que Dolo tenía con el pinganillo que le devuelve el sonido, el concierto no perdía ritmo y sin darnos casi cuenta nos metimos dentro de su Jungla. La noche no daba respiro y con temas como Galaxia o la emblemática Cuanta Vida las pulsaciones no bajaban ni por un segundo. Con la simplemente espectacular Runner, donde Dolo corría encima del escenario tratando quizás de escapar de esta realidad que nos envuelve, llegábamos al primer bis de la noche.
Tardaron poco el volver a las tablas para presentarnos la íntima y magnética 1000 Km. que el público escuchó bajo un silencio muy respetuoso. La noche era de ritmo y con Una Mañana y la fusión final de electrónica y guitarra de Invasión lo hacían por todo lo alto. No podemos acabar esta crónica sin mencionar el cambio de look final de Dolo –y era el tercero- donde unas gafas espaciales con luz dejaban totalmente sorprendidos a los allí presentes.
Tras de casi dos horas de concierto y 19 temas después, se daba por finalizado el concierto presentación del ultimo trabajo de Pastora en Madrid. Una apuesta sonora limpia y muy bien trabajada en directo que se completa con una apuesta visual con pintura en directo que dan lugar a un show completo. Teníamos muchas posibilidades musicales para la noche del pasado sábado en Madrid pero, sin duda, acertamos de pleno eligiendo el concierto de Pastora que tan buen sabor de boca nos ha dejado.