Las manos de Aurora se han mostrado desde su primer trabajo sinceras y cargadas de buena música como argumento para colarse en nuestras vidas. La verdad es que han conseguido hacerse un hueco sólido a base de sonidos poco comunes en la escena musical. Sacando nuestras mentes de lo convencional nos dan que pensar y nos invitan a formar parte de sus juegos de palabras.

       Nosotros quisimos invertir los papeles, haciendo que una tarde entre tés en el Amargo, se convirtiese en una búsqueda de aquello que no vemos a simple vista en su música. Lo cierto es que nos sorprendieron brillando por encima de la media.

        LBM – ¿A Aurora tampoco le gustan las fronteras?

Julio – No. De hecho nuestra lucha actual es romper las fronteras, llegar a la internacionalidad. Es buena idea salir, escapar de nuestro pequeño mundo. Las fronteras tanto físicas como musicales hay que romperlas.

       LBM – ¿Lo más eficaz para despejar dudas es abrir una puerta nueva? 

Julio – Se abren nuevas preguntas, que acaban teniendo nuevas respuestas y, que acaban llegando al lugar donde empezaste a buscar. No sé cómo llegas a abrir puertas, pero creo que tal vez la forma sea derribando fronteras. Así generas esos interrogantes. La curiosidad es la única forma de avanzar y de no aburrirte de ti mismo.

        LBM – ¿Qué dicen las voces que están alrededor de Aurora? 

Javi – Las voces son contradictorias. No hay un mensaje firma y claro. Estamos en continua contradicción contra nosotros mismos y, en ocasiones, la gente que nos rodea también nos lanza mensajes contradictorios. Cada persona tiene una cosa que decir y eso se mezcla. Pero siempre hay que escuchar. Si solo escuchas un mensaje no es bueno.

        LBM – ¿Para brillar como un cisne hace falta dejar de pisar tierra firme? 

Carlos – Yo creo que para brillar más, hay que pisar tierra poco firme. Con perdón de la expresión, cuanta más mierda, mejor. Cuando sabes lo que es, evitas volver a recaer en ello.

Julio – Está bien conocer lo onírico y lo bello, pero también lo terrenal y lo sucio. Así puedes valorar y ver la belleza en ambos.

        LBM – ¿Vosotros ya no tenéis arena en los ojos?

Julio – Sí, siempre la tendremos. La dualidad entre estar medio dormido y medio despierto recorre nuestras canciones como un tamiz. Por eso describen nuestro sonido de esa forma. Tal vez en este disco hemos jugado un poco más con lo ecléctico buscando que no solo sea un sonido onírico o atmosférico. Hemos intentado otras cosas. Pero sí tenemos claro que la base de nuestra música es tener esa arena en los ojos.

        LBM– ¿Esperáis que en el mundo de la música la gente se quite la venda y busque más allá de lo convencional?

Javi – Yo la verdad es que no espero que nadie haga nada que no quiera hacer (risas).

Julio – Cada uno debe buscar en lo que le atrae. Es duro, pero la realidad es que es parte del aprendizaje comprender que uno no tiene la razón. Si tenemos la suerte de que haya gente que coincida con nuestra forma de hacer las cosas, tendremos la suerte de que no hará falta que toquemos solo en nuestra casa (risas). Por ahora hemos tenido la suerte de que hay gente que quiere vernos.

        LBM – Top 5 momentos en los que Aurora hayan dicho: Uf esto va en serio.

Carlos – La llegada de la caja con los discos.

Javi – El momento en el que conocimos a Sebas, nuestro manager.

Julio – México. Otro muy importante fue grabar nuestro primer disco. Ganar ese concurso y entrar a grabar, así, fue una oportunidad magnífica.

Sebas – ¿Puedo decir la quinta yo?

Julio, Javi y Carlos – ¡Sí, claro!

Sebas – El día que tocasteis en el Primavera Sound, estabais como un niño con zapatos nuevos.

Javi – Yo ahora echo la vista atrás y pienso que en esa actuación éramos muy inocentes (risas).

        LBM- ¿El aire corre más rápido si soplamos detrás?  

Javi – Yo creo que eso es imprescindible.

Julio – Sí, siempre hace falta una ayuda. El esfuerzo es lo más importante, porque los vientos son cambiantes. En ocasiones el aire viene a la contra, pero no por ello hay que doblegarse.

Javi – Cuanto más tocamos, más vivimos este mundo, nos damos cuenta del trabajo de los grupos y de todo su entorno. A veces, la gente que está fuera no se da cuenta de que está ahí. Mucho barro (risas).

Carlos – Lo más importante es saber luchar con el viento en contra sin despeinarse.

        LBM – ¿El sílice os hace más sólidos? 

Julio – Sí, ha sido un paso muy importante. Veníamos de un primer disco que habíamos hecho cuando aún no sabíamos muy bien como iban las cosas. Ahora hemos dado los pasos que sientan nuestras bases y el camino que tomaremos en el futuro para continuar con nuestra trayectoria.

Carlos – Hemos repetido mucho que este disco es como un primer trabajo. Cuando grabamos por primera vez no tuvimos el control en ningún momento, ahora sí.

        LBM – ¿Pensáis que el mejor nuevo medio es darse por entero? 

Julio – Cada uno lo intenta por un sitio o por otro. Hay gente que se inventa su vida y a veces le funciona, nosotros intentamos hacer las cosas más fieles a nuestras creencias y no sabemos si funcionará. Si nos gusta la nueva visión de restar peso a determinados medios y abrir un poco las miras a nuevas publicaciones. Parece que así todo el mundo tiene voz.

       LBM – ¿Dónde guardáis la música? 

Carlos – En las manos. De ahí también la saco, no solo la guardo.

Javi – Además va muy con nosotros, porque la portada de nuestro disco son unas manos (risas).