Julio de la Rosa tiene el don. Ese don que poseían los hombres renacentistas, inmersos en varias ramas del arte para deleitar a los que les rodeaban. Ese, que perdurará en el tiempo llevando su maestría más allá del presente y, por supuesto, mucho más allá de nuestro disfrute. Julio de la Rosa es un hombre renacentista y además es un genio sin fecha de caducidad.
Hace algo más de un mes nos amenazaba con un nuevo libro, disco y BSO a través de sus redes sociales y así, envuelto en ese halo de misterio e interés que solo el jerezano sabe generar, ha llegado Hoy Se Celebra Todo. Un buen mapa con diez paradas a través de las que nos cuenta historias cotidianas con las mejores melodías y la sinceridad característica de su música.
Hoy Se Celebra Todo da comienzo con voces, sonidos, aullidos, da comienzo con dolor y con amor. Maldiciendo la amistad que se marcha sin voluntad propia. Pues cuando Rafa Angulo nos dejó huérfanos al fallecer en Malapascua, sembró dentro de Julio una sentida semilla que ha dado como resultado una preciosa canción llena de maldiciones. Malapascua, es el recuerdo y la vida a través de la muerte.
Con mucha pericia, y sin dejarnos adivinar si conecta o desconecta con las siguientes canciones de este disco, nos lleva directos a Las Puertas, declaración universal de amor, en la que inevitablemente cantaremos todos a la vida con un Hoy Se Celebra Todo. Pero despreocuparos si sois de los que amáis el aire canallesco del que Julio hizo gala en sus dos últimos trabajos, porque no desaparece ni mucho menos, y con un buen zarpazo, cierra la trilogía que inició con La Herida Universal. Porque, ¿qué sería del amor sin una buena dosis de sexo salvaje? Pues eso, baja la guardia, que el Julio más canalla te espera con sus Juegos de Mesa.
Cuando llegues al corte cuatro del disco, sabrás que Las Cosas que Pasan podría haber estado perfectamente situada dentro de esos pequeños trastornos sin importancia que aprendimos a hacer nuestros hace ya algunos años. Aunque sibilinamente, también podrás darte cuenta de que habla exactamente de lo contrario. Porque el amor del bueno ha de fluir y por supuesto, no debes pretender haber conseguido algo Con Quererte.
El Desvarío de un Superviviente es el fruto de las noches sin dormir, de esos documentos de Word en los que, atados entre sí, Julio llegó a pensar que tenía algo. Una novela, concretamente. Es, sinceramente, una genialidad de prólogo cantado que da comienzo a Wendy y la Bañera de los Agujeros Negros. Sí, el prólogo de su novela se ha convertido en una canción que bien podría ser la segunda parte de Kill The Mosquito, aquella canción de El Hombre Burbuja que todavía se pasea aclamada por los directos del señor De la Rosa.
Pero la agudeza de este músico va más allá. Celebrando la Suma es el festejo más hermoso tocado por la voz y la dulzura de Helena Goch. A estas alturas, mientras descansamos en el interludio de Asueto, le damos la razón a Gael cuando nos escribió para decirnos que su amigo Julio ya no cantaba enfadado. Delfines, y Por Fin, queremos decir por desgracia, llegamos al final de este álbum nuevo con la preciosa unión de Julio y Helena. Se ha terminado, pero esto no ha hecho más que empezar.
Ahora, reniega como lo hemos hecho nosotros, porque este disco habrá que disfrutarlo únicamente grabado, así que mejor hacerlo con una copa de buen vino. Es mejor, tal vez, descorchar la botella porque el final, y cuando decimos el final nos referimos a la sexta extinción masiva de nuestro planeta, ha llegado.
Autor; Shara Sánchez