Quedamos con Álvaro Guzmán, vocalista y guitarra de The Right Ons, en un céntrico bar del madrileño barrio de Malasaña, Madklyn. Un lugar lleno de encanto que nos hace sentir como en casa.
Domingo por la tarde, y en el ambiente flota el relax de haber finalizado la gira que les había mantenido ocupados durante los últimos meses, queremos saber que pasa por la cabeza del Rockero, tanto a nivel profesional como a nivel personal. Y él nos deja que le conozcamos un poco más.
LBM – Pregunta obligada, ¿Cuál es el futuro inmediato de The Right Ons?
ÁLVARO – Lo más inmediato, es grabar un disco el día 2 de enero. Dentro de 10 días, 2 semanas, nos metemos en Reno otra vez, volvemos a cargar el equipo y nos quedamos allí hasta el día 18, porque incluye mezclas y tal… Va a haber material nuevo en breve.
Ese es el plan inmediato. A parte de ir a ensayar después del día de Noche Buena. Yo habitualmente suelo ir a ver a mi madre en Fin de Año, pero este año no puedo ir, porque tenemos que ensayar esa semana. Así que currando…. Preparando, ultimando cosas, letras, y de todo.
LBM – En las últimas semanas habéis anunciado un cambio en el estilo de vuestra música. ¿No pensáis que quizá, lo que os ha llevado hasta aquí ha sido manteneros fieles a vuestro estilo?
ÁLVARO – Yo creo que lo que hay que ser es fiel a la música en sí, a lo que te sale de dentro y a lo que te pide el cuerpo en determinados momentos. Lo que creo que si puede referirse al cambio, es dejar de pensar en conceptos como, si es un grupo de Funk, es un grupo de Rock, es un grupo de Pop. Realmente creo que hemos llegado a un punto en el que estamos pensando en hacer música, independientemente del estilo o dirección, vamos a ver un poco lo que nos pide el cuerpo, y ya te digo que no hay un baremo fijo, es un grupo que va evolucionando y está vivo como sus componentes.
«Los bolsillos se te llenan de experiencias vividas, dinero hay poco, pero vida hay un montón»
LBM – La verdad es que siempre habéis sido muy Rockeros.
ÁLVARO – Siempre ha habido un componente Rock, eso es cierto… es como una vía, una red de tren, que se extiende por muchos sitios.
LBM – Lleváis muchos años en la música, no sé si lo describirías como tesón o cabezonería. ¿Teníais claro que esto era lo vuestro?
ÁLVARO – Siempre se me ha pasado por la cabeza que creo que puedo contribuir en este mundo, a nivel personal. Y a nivel de The Right Ons, pues yo creo que todos hemos creído que es una banda que puede aportar también, y hemos ido poco a poco haciéndonos un hueco y ganándonos el respeto de la gente. Yo creo que eso realmente, sí que está fundamentado en una idea original de querer hacerlo.
LBM – ¿Tesón o cabezonería?
ÁLVARO –Las dos… Dices, esto es lo que mejor se me da probablemente, tengo que poner toda la carne en el asador. Y así lo estamos haciendo todos, a base de muchos sacrificios, no es un camino fácil. Tienes que quitarte de muchas cosas, pero bueno…realmente lo hacemos por gusto, como es eso de “sarna con gusto no pica” (risas)
LBM – Habéis tocado en muchos sitios, algunos incluso donde bandas consagradas, aún no han podido llegar. ¿Consideras que habéis tenido un componente de estar en lugar adecuado en el momento adecuado, surgiendo con una frescura que no había en otros grupos, o es el fruto de un trabajo bien hecho que está detrás de la banda?
ÁLVARO –Pues creo que ha sido un poco de las dos cosas. Que es un producto bueno, y que se ha hecho un buen trabajo por parte del grupo, y también por parte de Heart of Gold, la que ha sido nuestra agencia de contratación hasta ahora. Desde el principio, han tenido ideas muy locas, y nos han puesto en sitios del mundo que nos han dado una experiencia y unas tablas, la verdad muy guay. Son momentos de vida que estamos muy contentos de haber disfrutado, cuatro giras por Estados Unidos, de repente aterrizar de tocar en Brasil, coger otro avión y tocar en Melilla. Te pones en unas tesituras y en unas situaciones que la verdad que hay que estar muy agradecidos.
LBM – Acumulando puntos en travel card (risas)
ÁLVARO – Si, la verdad que los bolsillos se te llenan de experiencias vividas, dinero hay poco, pero vida hay un montón.
LBM – Bueno, las experiencias también te gratifican y eso siempre está bien.
ÁLVARO – Sí, es lo que nutre el alma.
LBM – Algún lugar que consideréis “asignatura pendiente”, ¿dónde os gustaría llegar y no habéis podido aún?
ÁLVARO – San francisco, o Nueva Orleans. La parte oeste de Estados Unidos no la conocemos. Pero también me encantaría Australia…
LBM – Apuntando alto!
ÁLVARO – No, qué va! Aquí mismo, en «El Sol», otra vez, siempre hay ganas de tocar. Como a mí me mola tocar siempre hay ganas de tocar.
LBM – ¿Lo mejor y lo peor de The Right Ons para Álvaro, como vocalista y guitarra del grupo?
ÁLVARO – uuuuffffff….Empezaremos por lo mejor! Al final lo mejor es hacerte una familia de amigos, que somos muy amigos desde el principio. Desde que tengo 15 años he ido conociendo a todos los miembros paulatinamente, y tocando con ellos en diferentes proyectos, y ya te digo, que es un sentimiento de familia, el poder haber viajado, el poder hacer canciones buenas, y tener una complicidad en el local de ensayo y encima del escenario, pasarlo bien haciéndolo, yo creo que eso es lo mejor. Incluso en horas de furgoneta, ya estamos entrando lo peor, pero incluso en los malos momentos también puedes sacar sonrisas debajo de una bayeta sucia en la barra de un bar. Pero lo peor, es como una relación de pareja a cuatro, es como si tuviera cuatro mujeres, y además no tengo sexo con ninguna de ellas (risas) tengo solo los problemas, “ay, que me duele la cabeza!!” (risas) y además todos tenemos la regla, hay momentos que le toca a uno, otros momentos que le toca a otro, y al final siempre hay un montón de rencillas donde hay confianza. Llegas a unos niveles de conocerse a uno mismo y a otras personas, para mí ha sido como una terapia de Shock o de choque, porque yo tengo una manera de ser, y bueno, hay momentos en que no estaba encajando con el momento de la banda, tienes un toque de atención, y a veces no lo entiendes. Te ayuda a tomar una perspectiva distinta, no solo estamos con uno mismo, no solo están tus ideas, y si piensas desde tu punto de vista, y tu punto de percepción, y el hecho de tener a alguien ahí todo el día, pues te hace verte a veces desde fuera.
«Yo creo que lo que hay que ser es fiel a la música en sí, a lo que te sale de dentro y a lo que te pide el cuerpo en determinados momentos»
LBM – Pensaba que te ibas a quejar de más cosas (risas) como horas de trabajo, luchar con la industria musical…
ÁLVARO – Las pruebas de sonido son un coñazo, es terrible estar tres horas esperando para probar sonido. Cargar, y descargar… que lo hemos hecho siempre con la barbilla bien alta, aunque a veces también con el ceño fruncido porque cuesta, pero con la barbilla bien alta hemos hecho eso, y vendemos el merchan, conducimos, hacemos la post producción, tocamos.
LBM – Si, es verdad que mencionamos en nuestra crónica del concierto de Joy, que nos pareció muy loable por vuestra parte que estuvieseis en la puerta despidiendo a la gente que salía del concierto. Personalmente, me quito el sombrero delante de The Right Ons, porque el público estaba súper emocionado de que firmaseis una entrada, un disco que habían comprado en ese momento, poder hacerse fotos.
ÁLVARO – Yo creo que es una manera de terminar de hacer el trazo del círculo de una noche perfecta, porque con el concierto del otro día yo me quede muy satisfecho.Es música que está hecha por personas para personas, y siempre lo hemos hecho. Ya no se las veces que nos hemos bajado, empapados en sudor, como estábamos el otro día, y nos hemos ido al merchan directos, lo hemos hecho en muchas ocasiones, en donde sea, Austin, Coruña, el otro día estuvo bien porque fuimos todos, porque habitualmente vamos dos, nos turnábamos, depende de quien este encargado del “ministerio del merchan” en ese momento, (es que nos vamos cambiando los ministerios). Pero el otro día estuvo bonito que fuéramos todos, había sido algo especial y teníamos que cerrarlo así.
LBM – ¿Es cierto el mito de que los rockeros hacen lo que les da la gana?
ÁLVARO – Hay presión desde el núcleo del grupo, y hay veces que no puedes hacer lo que quieres, yo a veces quiero salir a tomar una copa después de un concierto y me dicen, no, te tienes que quedar en el hotel, que mañana hay otro concierto, y yo me enfurruño, desde ese punto más básico no se puede hacer lo que uno quiere (risas) Nosotros hemos hecho una canción en el último disco que se llama I do what i want, en realidad es hago lo que quiero, pero realmente es muy complicado hacer todo lo que quieres en esta vida, sobre todo para adaptarse a las circustancias, si haces siempre lo que quieres no tienes en cuenta a nadie, y no estamos solos, entonces siempre intentamos confiar en la parte de promo, “mira… tienes que ir a tocar a este sitio y hacer esto o lo otro”, siempre hemos confiado, más o menos. Vaya que no somos U2
LBM – Me imagino que U2 tendrá muchas más presión.
ÁLVARO – Sí, pero igual U2 llega y dice, no quiero hacer una gira, y nosotros, por ejemplo, nos gusta el trabajo, nos gusta tocar y nos dejamos guiar en lo que nos es nuestro sector, entiendo que lo que nos atañe a nosotros es hacer mejores canciones, buenos directos, y ser normales.
LBM – ¿Crees que actualmente los directos son una buena razón para enganchar a la gente?
ÁLVARO – Sí, hoy en día con todo el tema de internet, que ha supuesto una revolución en la venta y compra de discos, y en el mundo discográfico en sí, creo que lo que la gente se ahorra en comprar los discos, se lo gasta en conciertos, también porque es un evento social, te lo gastas en las copas, en una camiseta que te compras en el merchan, creo que el directo es fundamental, sobre todo para recibir lo bueno que tiene la música está bien hacerlo cara a cara, sobre todo con un volumen y unos vatios adecuados yo creo que la vibración y la frecuencia ayudan al espíritu, por eso hay que ir a los bolos y la gente se está dando cuenta. Yo creo que en este país se está formando una cultura festivalera de más, creo que la música en vivo esta en alza, no hay que dejar que caiga.
LBM – El encanto que tiene una sala pequeña, no lo tiene un festival
ÁLVARO – Sí, la actitud de la gente que va a una sala a ver un grupo no es la misma que cuando vas a un festival, que tienes 20 años y te estas fijando más en cómo le quedan los pantalones al de al lado, bueno, eso también pasa en una sala pequeña (risas) pero van más a pillarse un “pedo”, y preguntas a que grupos has visto? “Pues he visto media hora a Primal Scream, no me enteré de mucho iba super borracho”, y dices, guay de 200 conciertos has visto media hora…
LBM – ¿Alguna canción que suene de forma constante en la cabeza de Álvaro?
ÁLVARO – Pues una de Phill Spector, You’ve Lost that Lovin’ Feelin. Hay muchas que van y vienen pero esa ahora mismo es la que esta ahí.
LBM – A nivel personal… ¿carving, surf, rock, adicto a la adrenalina?
ÁLVARO – Más bien adicto a fluir, desde estar sentado tomándome una cerveza hablando con alguien, disfrutando de una buena conversación como ahora contigo, hasta hacerlo en el mar. El agua es fundamental, estamos hechos en gran parte de eso y siempre me ha molado mucho el agua. Yo creo que a todos nos mola, tiene algo especial. El surfing está muy ligado a ello, estar todo el rato salpicado de agua, iones negativos que te dan buen rollo, son los que abren la puerta a la serotonina del cuerpo. Y luego coger velocidad y aprovechar el mar, y estar en un entorno que es vida autentica, a mi es de lo que más me gusta. Llevo 21 años haciéndolo. He tenido la suerte de tener a mi abuela y a mi madre en La Coruña, y tener allí un cuartel general, porque si no en Madrid es muy complicado.
Cada vez hay más gente, que se sube los fines de semana, y cada vez está más de moda, el mercado de la ropa y de la moda de Surf se ha disparado en los últimos 15 años, y yo lo he visto. A mí es muy raro que me veas con algo de ropa de Surfing, porque lo llevo de verdad por dentro.
LBM – Tu madre no gana para disgustos…(risas)
ÁLVARO – Mi madre (risas) en las fotos del Facebook me pone; SOCORRO!!! o en plan “ya podías estar en casa tomándote un cafetito caliente”
LBM – No me imagino lo que te dice una madre cuando le dices, oye que voy a decantarme por la música.
ÁLVARO – Bueno, la verdad que yo iba a haber estudiado psicología y mi madre me dijo “uy, no le veo yo mucha salida a eso”. Entonces me fui a Londres, y cuando volví y empezó a ir en serio, es cuando les entra el canguelo. A veces me dice, porque no te buscas un trabajo? Y tengo que responder, estoy trabajando, esto es un trabajo. Hay veces que todavía queda ese pequeño Click en este país, porque en países como Noruega, eres músico, tienes seguridad social, y eres un embajador de tu país cuando vas a tocar fuera, te apoya el estado, eso son cosas que hay que mejorar en ese aspecto.
La verdad que puedes decir hago lo que quiero, pero tiene un precio.
Estoy contento de poder compaginar el Surfing y la música, pero en cuanto una de las dos cosas esta en mi vida la otra baja. En cuanto hay música, el Surfing cae, porque tengo que estar aquí, yo de hecho viviría en Lanzarote, pero vivo en Madrid, y es uno de los sacrificios de los que te he hablado antes. Yo pienso todos los días en el mar. Miro el cielo y pienso, como estará en Lanzarote, como estará en Coruña, y noto cosas y lo paso mal. Me gusta salir por Madrid, tengo un montón de amigos, y mi padre está aquí, y la banda, es lo que me tiene aquí pero sino esa combinación cambiaria.
LBM – Recomendación musical; queremos que nos digas una banda emergente que te haya gustado.
ÁLVARO – Una banda muy joven que tiene buenas maneras de hacer las cosas, es La Casa del Árbol. Además son buenos amiguetes, son súper jóvenes, súper guapos, hacen canciones que molan, son odiosos…. (risas)
Maika Makovski, no es nada nuevo, pero hay que apoyar la calidad de aquí. Somos muy amigos y hemos compartido carretera desde hace tiempo, pero el otro día estuve en el concierto de «El Sol», y me volvió a soprender.
Hay un grupo “Yanki” Delta Spirit, son de San Diego, van por su tercer disco, molan bastante. También Edward Sharpe and the magnetic zeros, que sacaron un disco en 2010 que se llama Up From Below.
LBM – ¿Un lugar para perderte?
ÁLVARO – Lanzarote.
Y así, con la sensación de haber conocido un poco más a Álvaro, nos marchábamos a casa. Con la mente repleta de ideas, de teorías, de cómo será el nuevo trabajo de The Right Ons.