Soy un lunar en su brazo
Lunar es algo relativo a la Luna, ese satélite que gira alrededor de nuestro planeta. Parece que Jero Romero se identifica con este cuerpo espacial desde que iniciase su carrera en nombre propio. La Grieta es el segundo disco que ha grabado para nosotros, los terrícolas. Una confección manual, diestra, artesana, electrificante y hermosa de diez canciones que flotan y te inundan de un mundo peculiar y reconfortante.
Hoy yo recordaré lo que pasó mañana
El ayer, el hoy y el mañana, jugadores de un tablero de la vida donde todos queremos saber, recordar y esperar. Jero maneja los tiempos a su gusto y antojo, sabiendo que el camino se hace al andar y que este verbo es irregular: que el ayer se queda atrás, que el mañana son preguntas sin respuestas y que el hoy vuela más rápido, va y viene buscando su particular visto bueno que tiene como destino los ojos del propio buscador de ese destino.
Descalza soy mucho más alta
En este camino los pies van descalzos pero no desnudos. Con una grabación “casera” y arropado por una banda que cada día suena más a banda, “Los” Jero Romero se hacen mayores en el arte de lo que ellos hacen: canciones sencillas, que no simples, que te atrapan con las escuchas dotadas de esa cadencia única y lunar que hace de su espacio ingrávido, tu espacio si quieres.
Todos los problemas numerados de mayor a mayor
Mayor es una palabra muy repetida en este disco. Como mayor fue el atrevimiento de lanzarse a un nuevo crowdfunding que superó con creces aquel primero de león. Y las dificultades adyacentes a este pequeño vasto proyecto, ¿dónde quedaron? Desde luego parece que las ordenaron todas y las fueron solucionando con una honestidad aplastante (los mails del propio Jero son una verdadera aventura perfectamente relatada) y con el descaro del que hace lo que siente y le da la real gana.
Me entretuve convenciéndote de que toda esta rutina es por tu bien
Convencer con un segundo disco, ese mito de la música mundial. Entretenerse es algo que La Grieta hace en dos sentidos. El primero y más obvio es que no entra a la primera escucha (al menos a mi parecer). Escuchas, oyes y re-escuchas buscando quizás aquellos tonos más llevaderos del primer disco y compruebas a la segunda que no es ese el camino. Esta grieta necesita que te entretengas un buen tiempo en ella, mirando y sintiendo en diferentes aspectos y lugares lo que el bueno de Jero trata de codificar y descodificar. El segundo sentido de entretener es el propiamente lúdico. Una vez que el disco empieza a tomar forma en tus oídos notas que su esencia primaria es entretenerte, hacerte pasar un buen rato. Un rato que se quedará en ti por mucho tiempo si dedicas esos dos sentidos, y el resto de los tuyos, a rebuscar en las letras lo que las melodías te susurran enlazadas.
Te pude dar todo y solo te di algo de pena para mí
El todo y el algo van de la mano con Jero Romero. Atreverse a destacar unos temas por encima de otro puede ser demasiado osado ya que creo que funciona, cuando realmente funciona, en su conjunto. Las diez piezas encajan, sobre todo con las repetidas escuchas, y están engrasadas para que el mecanismo de la grieta abra o cierre aquello que necesitas abrir o cerrar. Fue hoy es el buque insignia, para mí no hay duda. La clave más redonda, una canción contagiosa de alegría y de ganas de sentirse mejor que sube y sube desde el primer segundo y se queda en tu subconsciente más espabilado, para siempre.
Me gusta nunca equivocarme, miento para retratarme
La imperfección siempre he pensado que es cosa de genios. Buscada o no, resaltada o no, vista o sentida… tiene todo el lugar, sentido e intención en una obra de arte como es una producción musical. En el caso de La Grieta suena así, imperfectamente pura y singular, tejida con las manos y los medios elegidos.
Es complejo ser todos tus complejos a la vez
Complejidad y sencillez. Grietas y cerraduras. Solidez y sensibilidad. Dualidades que el trabajo de Jero siempre ha manifestado como suyas, vivas, cambiantes y supervivientes.
Solo una vez quiero volver a sentirme agraciado con la mala suerte
También yo creo en el mundo al revés
¿Y ahora qué vas a hacer con todo esto? Te aconsejo que empieces al revés. Deconstruye estas palabras, ponte unos cascos y abre La Grieta. Siéntete agraciado con la suerte de entrar en un mundo al revés, que nada en otra corriente nada corriente y cree que hay cosas diferentes que son más que posibles, son reales. Jero Romero y su compañía valiente te lo ponen en bandeja, conmigo lo han conseguido y no he sido fácil, más bien lo contrario, he sido exigente y atento con las instrucciones codificadas en los diez temas, he buscado mi lugar y mi momento más adecuado para sentirlo y por fin lo he logrado.
Autor; Toe