Hace ya mucho tiempo que descubrí por primera vez a Love Of Lesbian. Curiosamente un video de You Tube, de esos que salen a la derecha del que estás reproduciendo, los trajo a mi vida, y sin darme cuenta les veía en una sala que creo recordar no estaba ni llena. Entre ese momento y este han pasado un par de discos más, y sobre todo una buena dosis de lanzamiento al estrellato. Ellos solos han sabido luchar para vivir haciendo lo que más les gusta; subirse al escenario y vivir noches eternas.
Las tres Rivieras podían ser algo arriesgado, podían no haber estado a la altura, y sin embargo los LOL llegaron, cantaron, se “bien acompañaron” y triunfaron. Así, con todo eso, dejaron a Madrid sin palabras para describir de manera fiel lo que allí había sucedido. Iván Ferreiro, Coque Maya, Martí Perarnau, Ricky Falkner, Jorge Drexler y el gran Xoel López, tuvieron esa invitación lesbiana para entrar en el mundo inventado de los catalanes.
Entre Incendios de Nieve, Amantes Guisantes, capas, y gorros que emulan seres de otros universos, tal vez infinitos, ellos siguen dando a sus shows una buena dosis de humor en la que pueden, sin duda, hacer que todo lo cotidiano quede atrás. Cuando entras en un concierto de Love of Lesbian no importan las cosas reales. Como bien nos recordaban, los problemas quedan fuera, aquí hay que disfrutar, sin malos rollos, sin agonías. Puede que esa sensación de despreocupación sobre lo mundano haya sido la causa de un gran número de “haters” o tal vez como contestaron en una entrevista “el indie se fagotiza, no deja que ninguno crezca más que los demás”. Pero lo importante no son las etiquetas, ni si son más o menos independientes. Lo realmente importante es que siguen haciendo de lo que quieren por encima de todo, y los resultados son deslumbrantes.
Diciendo que no volverán hasta el 2016 a Madrid, en citas de este tipo, dejaban claro que los que pensaban que la oportunidad de repetir el concierto iba a estar a la vuelta de la esquina se equivocaron. Tal vez, esa necesidad de sentirnos únicos con un grupo que toca en todo el panorama nacional y para un público de lo más variopinto, es el empuje más intenso para corear y saltar.
Así, oniria encontraba por fin a insomnia, inesperadamente, con un bis calmado que relajaba todo lo que habíamos exaltado previamente, y dejábamos que el lento canto reparador nos envolviese hasta llegar a casa. Dulce, cargados intensidad en un mar que es gris ciudad, siempre nadando al encuentro de las citas con Love Of Lesbian.
Autor; Shara Sánchez.