Con canibalismo gourmet devoramos Palosanto, el nuevo disco de Enrique Bunbury. Ya con el primer single “Despierta”, nos dimos cuenta de que su posición como uno de los mejores músicos de nuestro país no corre peligro alguno.
Canciones que buscan un cambio social y denunciar una situación de la que no deberíamos ser prisioneros componen un álbum de dos horas de duración; dos horas en las que el zaragozano demuestra que sigue siendo un maestro a la hora de reinventarse y mantener el altísimo nivel al que nos tiene acostumbrados.
En temas como “Los inmortales” o “Destrucción Masiva” transmite fuerza y energía como pocos saben hacerlo; otras como “Salvavidas” o “El cambio y la celebración” invitan a la reflexión y algunas como “Mar de dudas” y “Nostalgias Imperiales” nos cautivan por sus letras y melodías cuidadas al extremo. Aprovechad que se edita en tres formatos: CD, Edición Deluxe y vinilo, y haceos con Palosanto, una apuesta segura por la calidad y la elegancia que caracterizan al maño.
En el cine no se suele utilizar el plano secuencia porque hay que coordinar muchos elementos y si uno falla, ya no sirve. Pero tras disfrutar al completo del que este cantante nos regala en forma de canciones, lo único que podemos decir es que más alto que Bunbury, sólo el cielo.