Rising Up, el segundo álbum de Polock, llegaba precedido de una serie de videos en los que explicaban las sesiones de grabación, la unión entre los miembros de la banda y de donde bebía este nuevo trabajo. Incluso con tanto detalle se nos quedaban cortas las palabras para describir un nuevo paso de altura de la banda valenciana, a los que cada día vemos más internacionales. Repetían portada dibujada a mano por Carla Fuentes, haciendo de su trabajo algo único. La demora de su presentación en la capital no hacía más que aumentar las ganas de ver como se defendían este manojo de hits que componen el álbum en directo.
Por fin marcaban día y hora, pero Madrid no espera por nadie y ese mismo día, un sinfín de citas hacían elegir al público. Demostraban que el talento tiene su recompensa y un merecido Sold Out dejaba claro que lo que Polock nos ofrece es difícil de encontrar. Bien armados con luces extra e instrumentos desplegaban su talento musical. La madrileña Sala El Sol, se transformaba de pronto en un nuevo ambiente en el que la atmosfera se teñía de rojos y azules, ganas de bailar y algo de desenfreno.
Una por una las canciones de este nuevo trabajo se intercalaban entre las que componen Getting Down From The Trees y, sin parar de corear, bailábamos como si de una ciudad freakie se tratase, entre unicornios, fuegos artificiales y la preciosa puesta en escena en la que la música superaba con creces las palabras de Papu, el cantante de la banda. Salvaban con estilo los problemas de sonido de los primeros temas, compensándolo con un coraje impresionante a la hora de cantar y tocar las siguientes y, si bien es cierto, que el directo y el disco tienen sus diferencias instrumentalmente, es en vivo donde ganan puntos.
Las referencias de esta banda son claras, hacen música para poder bailar buscando algo más en ella. Se centran todo lo que pueden en buscar sonidos ornamentados que acompañen a sus letras cargadas de extrañas situaciones, llevándose con eso la atención de los que como ellos, miran más allá.
Como resumen de la noche, nos llevamos a casa el grato momento vivido con una banda que, llevando la ropa de los domingos de nuestros abuelos, saben hacernos bailar y cantar, con la naturalidad de la música que les gusta hacer. En realidad, estamos encantados de conocer a Polock.
Autor; Shara Sánchez
Pics; Toe